El pasado viernes, la PAH realizó el último escrache de la campañana Hay Vidas en Juego a Mariano Rajoy con motivo de su presencia en la feria del automóvil de Barcelona
La convocatoria proponía al presidente del gobierno debatir sobre democracia sin pantallas de por medio. De ciudadano a presidente. Sin embargo, Mariano Rajoy, como viene siendo habitual, no se dignó ni tan siquiera a acercarse a las personas concentradas.
La campaña de escraches Hay vidas en Juego se enmarca en el debate de la ILP en el Congreso y propone un diálogo a los diputados que iban a votar unas medidas de la ILP, las cuales afectarían directamente sobre el futuro de centenares de miles de personas. Frente al peligroso desconocimiento de la realidad de los diputados, la PAH llevó la realidad de los afectados allá donde se encontraban los políticos.
Frente a la demanda de diálogo de la ciudadanía, que no cuenta con canales de comunicación e interpelación a los diputados, un diálogo necesario para la salud democrática de cualquier país civilizado; el Partido Popular, en lugar de escuchar a las personas afectadas, que conocen el problema en primera persona, ha optado por iniciar una guerra mediática de criminalización de la PAH y la práctica de los escraches. Una estrategia elaborada para desviar la atención sobre el debate de la ILP, y la ley aprobada por el PP, una ley que responde a los intereses de las entidades financieras y que no resolverá el problema del 99% de las familias afectadas.
La tramitación de la ILP en el Congreso ha evidenciado de manera flagrante el abismo que separa a la clase política dirigente de los problemas de la calle. Y ha agravado aun más la crisis democrática que sufre el sistema actual, ha constatado que vivimos en una democracia secuestrada por las entidades financieras con la connivencia de los poderes públicos.
Hace unas semanas, la PAH concluyó su triología de videos con un video dirigido al presidente Mariano Rajoy, en el mismo formato en el que éste aparece frente a los medios de comunicación: tras una pantalla de plasma.
Con la campaña de escraches y la aprobación de la ley de deudores hipotecarios presentada por el Partido Popular ha resultado evidente que la democracia representativa se encuentra en una crisis profunda. En este contexto, ha de ser la ciudadanía la que autotule sus derechos, como efectivamente seguirá haciendo la Plataforma de Afectados por la Hipoteca.